Me pregunto qué fiabilidad tiene si se excluye el ocio nocturno, la M-40 o Barajas. El oído de los vecinos no entiende de competencias sino de molestias.
Hay que admitir que el mapa de ruido presentado hoy por el equipo de
gobierno está a su altura en el sentido que tiene la misma credibilidad que él;
es decir ninguna.
Ha bajado tanto el ruido en Centro, tal y como presume el responsable del
Área, que casi el 90% de los vecinos de Aurrerá, según un estudio municipal, se
sigue quejando de él tres años después del plan especial, los del barrio de Las
Letras estudian llevar los niveles al tribunal de Derechos Humanos de
Estrasburgo y los de las Cavas y Costanilla llevan cuatro años denunciado las
molestias que van en aumento por el incremento de los locales de copas.
Por si fuera
poco, añadió, queda fuera de las mediciones el ocio nocturno y focos de
contaminación acústica tan notables como la M-40 o el aeropuerto de Barajas con
el pretexto de los ámbitos de actuación. El oído no entiende de competencias
sino de molestias.